El presidente de Colombo, Sri Lanka, Ranil Wickremesinghe, ha dicho que los empleados del sector gubernamental no recibirán otro aumento salarial este año, advirtiendo que nuevos aumentos salariales sin una planificación adecuada podrían paralizar al gobierno antes de las elecciones presidenciales y generales.

El hombre de 75 años, de quien se espera que busque la reelección para el cargo de presidente, reconoció la presión sobre la economía y afirmó que los programas anteriores que proporcionaban mayores beneficios y asignaciones habían agotado el exceso de fondos, informó el domingo el portal News First.

Wickremesinghe destacó el aumento salarial de 10.000 rupias de Sri Lanka y los beneficios adicionales implementados en el marco del programa "Aswasuma".

Hizo hincapié en la necesidad de responsabilidad fiscal y advirtió que nuevos aumentos salariales sin una planificación adecuada podrían paralizar al gobierno, según el informe.

Wickremesinghe, que cumple el mandato restante del presidente derrocado Gotabaya Rajapaksa desde mediados de julio de 2022, destacó la necesidad de priorizar la estabilidad nacional de cara a las próximas elecciones.

El presidente anunció la formación de un comité encargado de revisar los ajustes salariales. Sus recomendaciones se incorporarán al presupuesto de 2025, allanando el camino para posibles aumentos salariales el próximo año, según el informe.

Wickremesinghe dijo que el enfoque de su administración beneficiará en última instancia al pueblo y reiteró la importancia de centrarse en las próximas elecciones, sugiriendo que es posible que otros partidos no prioricen la estabilidad económica con tanta eficacia.

Las próximas elecciones presidenciales tendrán lugar entre mediados de septiembre y mediados de octubre.

Wickremesinghe, que era primer ministro cuando Rajapaksa fue derrocado mediante una agitación pública en las calles que duró meses, dirigió con éxito al país a través de la crisis económica que la familia Rajapaksa atribuyó al gobierno.

Wickremesinghe, que también es ministro de Finanzas, puso fin a las colas para comprar productos de primera necesidad, a la escasez y a las largas horas de cortes de energía y obtuvo un rescate del Fondo Monetario Internacional (FMI), cuyo proceso se inició durante los últimos días de Rajapaksa. Sri Lanka, que recibió 2.900 millones de dólares durante un programa de cuatro años del FMI, contó hasta entonces con la generosa ayuda india por valor de 4.000 millones de dólares.

Wickremesinghe pretende presentarse como candidato independiente, respaldado por todos los partidos políticos que están decididos a mantener el programa de reformas económicas establecido por él.

Los otros dos principales líderes de la oposición, Sajith Premadasa y Anura Kumara Dissanayake, del partido marxista Janatha Vimukthi Peramuna, ya han anunciado su candidatura.